―Santo, Santo, Santo es el Señor Todopoderoso; toda la tierra está llena de su gloria. 4 ¡Qué tremendo canto! Hizo temblar el templo hasta sus cimientos, y súbitamente todo el santuario se llenó de humo. 5 Entonces dije: «¡Esta es mi muerte! Porque soy un pecador de ...
porque soy más santo que tú.” Esos son humo en mi furor, un fuego que arde todo el día. 6He aquí que está escrito delante de mí, y no callaré, sino que les daré su merecido; les daré el pago en su propio seno.