la esperé en la puerta de su casa. Cuando Susana salió me preguntó si era “la chica de la computadora”, porque en ese momento ella tenía una página web y de 100 mensajes que le llegaban, 99 eran míos.Empecé a ...
A Candela Prieto no le causó gracia el mensaje. Salió de la oficina enojadísima y preguntó a sus empleados quién estaba haciendo ese chiste espantoso. Todos la miraron sin entender. Volvió a entrar, se sentó en la computadora y espió el perfil de la otra Candela. Había cinco foto...